La Feria Internacional del Libro de Guadalajara se vuelve, a veces, escenario de felices coincidencias. Como la vez, hace un par de años más o menos, en que coincidieron en sus instalaciones varios premios Nobel —Nadine Gordimer, Gabriel García Márquez, José Saramago y Joseph Stiglitz.
Pues bien, el encuentro librero tapatío, sin proponérselo, se convirtió este año en el punto de reunión de los tres premios Cervantes mexicanos vivos: Carlos Fuentes, Sergio Pitol y el recién estrenado José Emilio Pacheco. Si se quisiera reunir a los cuatro mexicanos que han recibido el galardón, entonces sería necesaria una médium o, al menos, una buena ouija: Octavio Paz colgó los tenis hace ya un buen rato.
En fin, cosas de la vida: la FIL de este año reunió, de chiripa, a Los Tres Alegres Cervantes.
Texto: Turco Viejo
Fotos: Tonatiuh Figueroa
Está muy bien que a Pacheco le den el Cervantes, el Nobel, el Oscar, el oro en cien metros planos, y hasta que se saque el Melate y la casa del Tec. Lo que no está bien es que pongan ¡tres! fotos de él. ¡No hay por qué! Bonito no es, vamos diciendo…
Oka. Oka! Jajajaja. La verdad sí le tira a feo. Feyón! Abrazo, don Azote!
Ah… ¿Es el mismo García?
Es que como dijeron que eran tres cervantes, yo estaba pensando que eran distintas personas…
Pero ahora que me fijo, sí, esas manotas se parecen mucho.
De los tres cervantes, yo me quedo con Pitol.
Memos, memos, es que nos agarró un loco amor por el viejillo. Queremos pasar la vida con él, como la Cristina P. Ja!