Jaque a Chespirito

Es el chisme del momento en el mundillo de la farándula mexicana: Chespirito, el famoso cómico que encarnó al Chavo del Ocho y al Chapulín Colorado, actuó para el narco en Colombia. Al menos eso es lo que afirma Fernando Rodríguez, hijo del narcotraficante Gilberto Rodríguez, alias “El Ajedrecista”, en un libro de próxima aparición. En El hijo del Ajedrecista, Rodríguez relata las fiestas que su padre realizaba y a las cuales –afirma– asistieron desde Roberto Gómez Bolaños (Chespirito) hasta Juan Gabriel. Por su parte, Bolaños contestó en un comunicado que “nunca he estado ligado al narcotráfico en ninguna de sus formas”. Es curioso que se vincule a Chespirito con negocios oscuros, siendo él un personaje que se ha manifestado públicamente contra la despenalización del aborto. ¿Será que se le “chispoteó”? ¿O fue “sin querer queriendo”? En cualquier caso, ¿qué más da? El narco está tan infiltrado en todos los niveles sociales y políticos tanto en Colombia como en México, que es difícil hacer negocios sin rozar su dinero. Esa es la realidad y nadie debería sorprenderse.