La sexosa vida de Propellerman

Propellerman es el héroe sexual. Su vida está concentrada en la satisfacción femenina. Así lo ha sido siempre. Generoso, como todos los hombres aman a las mujeres (Fonseca dixit), Propellerman ha difundido su secreto y lo ha puesto a disposición de las masas: la ultrastamina, contenida en las grageas de MegaBang.

Este hombre de acento siberiano se hace llamar el superhéroe de los deseos femeninos, porque lo es. Y en sus videos deja bien claro porque las MegaBang son lo mejor que pudo haberle pasado a la sexualidad mundial.

Ha salido en distintas portadas de revistas, como la Time y la Rolling Stone (versión estadunidense). No se sabe su origen, pero se sabe que se ocultó en el Amazonas para “escapar de la civilización” y encontrarse a sí mismo. Ahí conoció a la gente de la tribu Yawanawá, con la que vivió seis años. Fue en ese periodo donde abrevó de los conocimientos medicinales de los Yawanawá: “En uno de los rituales de la tribu, un brebaje especial me dio la habilidad de hacer girar mi mejor parte como una hélice. Y finalmente me encontré a mí mismo”.

Propellerman tiene club de fans, página en MySpace, blog y muchos videos de su activísima vida. Seguro que no desea pasar inadvertido en el mundillo de las campañas virales. Si el Doctor Simi no se hiciera a sí mismo la publicidad, sin duda la extraordinaria carrera de Propellerman sería buen ejemplo para él.