Contemplen, estimados visitantes, a la chica de la foto. Luego de recorrer lo que tengan que recorrer con los ojos, respondan la siguiente pregunta:
¿Cuántos años tiene?
Es importante que se hagan la pregunta porque, de no ser así, corren el riesgo de sufrir la misma suerte que Franck Ribéry, Sidney Govou y Karim Benzemá, futbolistas franceses que le dejaron ir las pelotas a la pequeña Zahia Dehar y ahora están metidos en una bronca por proxenetas: cuando jugaron el cancha de la rubia Dehar, ésta no tenía las medidas reglamantarias. O dicho de otro modo: era menor de edad.
Zahia D., cómo también se le ha conocido últimamente, es una prostituta que pasó por la cama de los tres jugadores. El problema es que ellos nunca le preguntaron su edad, y ella tampoco tuvo la cortesía de decírselas. El tarifario que manejaba la güerita va así: 500 euros por ponerle con Benzemá, 700 por dar maromas con Ribéry. No se sabe cuánto pagó Govou, pero seguro también se mochó con un buen billete porque Zahia ha declarado, como quien abre el baúl de sus recuerdos más preciados:
“Ribéry, Benzema, Govou… Los amo a todos, me trataron con un respeto absoluto”
Como agredicmiento a ese buen trato, la muchacha ha demostrado que no sólo la (s) mueve (por) el dinero y que sí tiene sentimientos: cuando explotó el escándalo, se dio prisa para dejar en claro que:
«Me acosté con ellos, pero no les dije la verdad sobre mi edad. Me encantan. Deben dejarlos en paz. Ellos me lo consentían todo y se ocupaban de mí. Eran mis hombres»
Aunque eso parece importarle poco a las autoridades. De ser encontrados culpables, los futbolistas galos podrían enfrentar una pena de 3 años de prisión y 45 mil euros de multa. De los tres, el que parece que va a salir bien librado es Govou porque, se dice, cuando él se puso a jugar con los balones de Zahia, ésta ya era mayor de edad.
Traemos esta nota aunque está viejona como previa al partido de hoy entre el Lyon, donde juega Govou, y el Bayern Münich, donde juega el buen Ribéry.
Y como colofón, un video de Zahia Dehar, donde pueden darse una idea de los quiebres que les hizo a los franceses. Provecho.
¿Cuánto tiempo tardaría una persona, a quien llamaremos Alguien, en leer Los relámpagos de agosto? Y si Alguien no hiciera otra cosa más (ni trabajar, ni comer, ni dormir, ni chatear, ni tuitear) que leer el libro de Jorge Ibargüengoitia, ¿cuántas horas se llevaría? Nadie lo sabe. Porque, para empezar, dependerá de los hábitos lectores de Alguien. Lo que sí podemos saber es cuánto se tardaría un grupo de Alguienes: tres horas. 180 minutos fue lo que tardaron los lectores congregados en la Rambla Cataluña en darle toda la vuelta a la novela del escritor guanajuatense, obra elegida para celebrar el Día Mundial del Libro en Guadalajara.
El grupo de Alguienes ha estado leyendo sin parar desde las diez de la mañana. El primer Alguien no se llamaba así, sino que en su acta de nacimiento consta que se llama Fernando del Paso. El autor de José Trigo fue el encargado de abrir el maratón de lectura, para luego dar paso —valga la repetición— a los políticos (o peor: sus representantes) ávidos de tomarse la foto del recuerdo. Una vez que se fueron los señores trajeados, comenzó el desfile de los verdaderos usuarios del festejo: los lectores de a pie: estudiantes, peatones, artistas plásticos, poetas, narradores, en fin, todos los interesados en leer en voz alta. (En la foto que abre este post se puede ver al escritor David Izazaga, director de la revista KY, con su sombrero militar —o como se llame lo que lleva en la cabeza— y toda la cosa.)
Las ganas de leer son muchas. Para muestra, dos botones: el primero, que la gente no para de llegar a la Rambla Cataluña y ofrecerse para leer. El segundo, que el actor Damián Alcázar, anunciado para cerrar el maratón, no se aguantó y subió en la primera ronda, con la promesa de que también subiría para cerrar. Otro botón de muestra: el escritor Francisco Hinojosa, que anda de visita por Guadalajara, también le va caer a leer. Su participación está anunciada para las 20:30 horas. Para ese entonces se estima que Los relámpagos de agosto habrán sido leídos tres o cuatro veces.
Mientras unos leen en voz alta, otros compran libros en los stands distribuidos por la explanada. Eso sí: lean y/o compren, todos se llevan una rosa. Ya saben, por aquello el St. Jordi y tal. Si quieren sumarse, y leen esto a tiempo, cáiganle a Escorza esquina Juárez. La actividad cerrará a las nueve de la noche.
Porque usted, estimado Alguien, no puede quedarse con las ganas de sumarse al grupo de Alguienes.
Relampagueó el post: Turco Viejo / Fotos: arriba: el mismo que relampagueó; abajo, Robotania.
Disculparán ustedes, apreciables visitantes, la intermitencia en que ha caído este blog. Pero pasa que el Turco Viejo está teniendo una de esas crisis seniles que siempre llegan a determinada edad. Además tiene una dentadura nueva, y eso siempre lo pone de malas.
Como sea, y para romper un poco con la inactividad, les traemos este video. En él dejamos descansar un poco el fútbol y nos vamos al llamado Rey de los Deportes: el béisbol. La escena que están a punto de presenciar ocurrió en una liga universitaria. El protagonista es un tal Kownacki, quien viene a demostrar que siempre hay una manera de sorprender al contrario, a la grada, al mundo y, de pasada, anotar una carrera.
La emblemática banda neoyorquina de street punk realiza una gira por México. Este viernes 23 de abril toca el turno a Guadalajara, en Calle 2. En entrevista, el vocalista de The Casualties, Jorge Herrera, habla sobre su reciente material
La jornada se promete sudorosa. The Casualties, una de las bandas más representativas del hardcore street punk neoyorquino, encabeza un cartel que este viernes, en Guadalajara, inundará Calle 2 con baile, ráfagas de fraseos trepidantes y mucho espíritu punk. “Cuando tocamos siempre damos el cien por ciento. A nosotros no nos importa si van diez o mil personas: la banda da cien por ciento y sale del concierto bañada de sudor. Somos una ametralladora, no paramos. Si se daña la guitarra, seguimos sin guitarra; si se daña el micrófono, la banda no para. Nos van a ver actuar de una manera sincera”, comparte Jorge Herrera, vocalista de esta banda que se formó a principios de los años noventa en el Lower East Side neoyorquino, en un primer momento, como una manera de alimentar el espíritu en el ajetreo cotidiano. “La música nos ha mantenido con vida, como alimento. Cuando formamos la banda fue hecha para hacer algo después del trabajo, para sentirnos mejor, nunca pensamos viajar”.
We are all we have (2009) es la placa que los Casualties traen bajo el brazo, la más reciente de una extensa discografía que repasarán en su visita a Guadalajara. “El movimiento punk es como un carrusel, va de arriba para abajo. Y en los Estados Unidos, en este momento, ha ido para abajo, por lo menos el movimiento punk político como el de nosotros. We are all we have significa que nosotros somos lo único que tenemos ahora: esto es para alentar a los pocos que tenemos, que no están solos”, explica Herrera sobre el mensaje del último trabajo de esta banda cuyas letras se caracterizan por una fuerte crítica a las estructuras de poder de la sociedad: el estado, la policía y la religión.
Discografía:
For the punx (1997)
Underground army (1998)
Stay out of order (2000)
Die hards (2001)
On the front line/En la línea del frente (2004)
Under attack (2006)
Made in N.Y.C (2007)
We are all we have (2009)
Maggers (batería), Jake (guitarra) y Rick (bajo) completan este cuarteto que desde sus primeros años trascendió las fronteras de su barrio y se ha presentado en América Latina, Europa y Japón. Son, acota Jorge, exploradores para los que el mundo es un mismo país con un lenguaje único: la música punk. “El espíritu siempre ha sido la clase trabajadora. Escuchar a otros, aprender un poquito y meter un poco de lo suyo en el movimiento, quizá resulte algo positivo. El punk es para mí tener la mente abierta y crear nuevas cosas”, concluye Jorge, para quien, a pesar de la nostalgia de la etapa dorada del movimiento en Estados Unidos, no todo está perdido e incluso la música comercial tiene algo que ofrecer. “Uno nunca podría haber sido punk si no escuchara alguna banda comercial alguna vez. Nadie nace punk. Algunos dicen que The Clash se vendieron, pero yo nunca hubiera sido punk si no los hubiera escuchado. Y con otras bandas pasa lo mismo”.
El cartel de este viernes 23 de abril se completa con las bandas locales Acidez, Los Gargas, Días de Radio y Conflicto Social. La estridencia comenzará a partir de las 18:30 horas en Calle 2 (Parres Arias y Periférico). El costo de los boletos es de 170 pesos en preventa, y 200 el día del evento, de venta en Mr. CD (Plaza del Sol, Patria y Gran Plaza), Pop Shop (Hidalgo y Gran Plaza), Anti Fashion (Plaza del Sol) e Imagen Pública (Hidalgo y Mezquitán).
¿Necesitaba, esa nariz, que alguien
se pusiera a escribir sobre ella?
Irresponsable, egoísta y vanidoso,
el ensayista seguramente responderá que sí. José Israel Carranza en «Anhelo y nariz»
El sujeto de la foto se llama José Israel Carranza. Y, ahí donde lo ven, es uno de los más tercos defensores, y sobre todo practicante, del ensayo. (Paréntesis: a partir de ahora y para el resto del texto, cuando escribamos ensayo nos referimos a la pieza literaria, no a las prácticas que hacen actores y bailarines y músicos antes de un show. Bien visto, este paréntesis era innecesario.) Pues bien, el señor Carranza presenta esta noche —y será noche, aunque haya luz solar por el horario de verano— su más reciente libro: Las encías de la azafata, que llega a las librerías gracias a las artes de Tumbona Ediciones.
En un principio, Carranza orientó sus letras por los caminos de la narrativa, más específicamente por los vericuetos del relato. Así, aparecieron publicados títulos como La sonrisa de Isabella y otras conjeturas o Cerrado las veinticuatro horas. Sin embargo, hace como diez años —»ocho o nueve», dice él con más precisión— comenzó a escribir los textos que integrarían, mucho tiempo después, Las encías de la azafata. (Libro donde, por cierto, no aparece ninguna azafata, y mucho menos sus encías. El título, dice el autor, se le ocurrió «quizá en algún vuelo, al ver a una azafata con unas encías alarmantes. Me llegó y decidí que algún día titularía así un libro».) Mientras fue armando el volumen, dice, se fue inclinando más y más por el ensayo. Y tanto se inclinó que terminó por dejar de lado la narrativa.
Como escribíamos al principio, José Israel Carranza es un defensor a ultranza del género: coordina un taller del género titulado El tubo de ensayo y no duda en señalar que es necesario «despejar malentendidos cultivados por la formación escolar, la academia y también las editoriales». Y es que, dice, para hacer ensayos se necesita casi cualquier cosa, menos la formalidad que muchas veces se le quiere endilgar al género.
Y bueno, vamos parándole al rollo. Si quieren saber más del libro, aquí les tenemos una sugerencia: apersónense mañana (jueves 22 de abril) en la librería José Luis Martínez del Fondo de Cultura Económica, mejor conocida en los bajos mundos como La Joseluisa. Ahí, a las 20:00 horas, tendrá lugar la presentación de Las encías de la azafata. La presentación en sociedad del libro contará con los comentarios de David Izazaga, director de la revista KY, y el mismísimo y temidísimo Dr. Maligno.
Ensayó el post: Turco Viejo / Foto: cortesía de Jorge Alberto Mendoza
Este domingo 18 de abril, en la Rambla Cataluña se repartirán galletitas de la suerte. De esas chinas que parecen un pellizco y saben a cono de nieve. Estas galletitas llevarán dentro frases de la obra del escritor que la gente eligió para ser leído este año durante el Día Mundial del Libro: Jorge Ibargüengoitia. Y las galletitas del domingo son apenas una parte de los preliminares de esta fiesta de los libros que alcanzará su punto culminante el viernes 23 de abril, con una lectura al aire libre en el mismo punto. Una celebración que la gente ha hecho suya desde que comenzó a realizarse en Guadalajara, ocho años atrás.
Empezó hace semanas. Las urnas transparentes estaban por toda la ciudad. Las encontrabas en cada librería. Y al contrario de lo que nos pasa con los candidatos en la política, en esta elección la tortura de la indecisión radicaba en los meros nombres de los tres aspirantes y los títulos de sus obras: Oscar Wilde con El retrato de Dorian Grey, JD Salinger, con El guardián entre el centeno y Jorge Ibargüengoitia con Los relámpagos de agosto. También se podía votar en Internet. La respuesta fue inmediata: los votos rebasaron los 28 mil y los 350 lugares para leer en el evento al aire libre se llenaron en pocos días. Jorge Ibargüengoitia se erigió como ganador. Y al contrario de las elecciones políticas, en esta nadie impugnó el resultado.
La charla con la directora de la Feria Internacional del Libro de Guadalajara, Nubia Macías, transcurre ágil. Sus ojos, como sus manos y sus ideas, no se quedan quietos. Le pido que abra una galletita de la suerte de las que se repartirán este domingo y que haga una pregunta. “¿La gente se va a entusiasmar con la lectura?”, pregunta. Y la galleta responde, contundente, con una frase de Los relámpagos de agosto: “Sería un crimen que por no hacer un esfuerzo, vayamos después a tener dificultades”. Imposible contradecir a la galleta. Nubia interpreta al oráculo: “Sería un crimen que no promocionáramos la lectura y no consiguiéramos que la gente vaya a leer ese y el resto de los días”.
Conquistar y seducir nuevos lectores es algo a lo que apuesta la celebración del Día Mundial del Libro, comenta la directora de la FIL: “Fomentar el hábito de la lectura es un proyecto de estrategias, no de metas: los lectores están vivos, las generaciones se renuevan y siempre vienen nuevos potenciales lectores detrás”. Y a propósito de la obra del escritor guanajuatense, Nubia enfatiza el carácter extraordinariamente actual de Los relámpagos de agosto, novela que narra las desventuras del general José Guadalupe Arroyo en el México post revolucionario. Es una obra ágil, ácida y cínica que nos invita a reírnos de algo que, de entrada, no debería ser gracioso: la tortuosidad del sistema político, la terrible corrupción, las alianzas en lo oscurito.
La cita para la lectura en voz alta es el 23 de abril, de las diez de la mañana a las nueve de la noche en la Rambla Cataluña (Juárez y Escorza), a un costado de la Rectoría de la UdeG. La voz que abrirá la lectura será la de Fernando del Paso, a la que se unirán, entre muchas otras, las de los escritores Antonio Ortuño y Víctor Ortiz Partida, de la cineasta Kenia Márquez y de los actores Ofelia Medina y Damián Alcázar, protagonista de la película Dos crímenes, basada en otra novela de Jorge Ibargüengoitia. Todos los lectores recibirán una rosa y un ejemplar de la obra como obsequio. También habrá una mini feria del libro, en la que participarán editoriales y librerías.
Y así es como Los relámpagos de agosto alumbran abril.
No falte ni este domingo a consultar su oráculo en forma de galleta ni al viernes festivo de la próxima semana. Si usted quiere leer y ya no alcanzó lugar, no desespere y preséntese el mero día: siempre hay necesidad de más lectores. Y despreocúpese si suelta una carcajada. Esto es una fiesta.
«Que no obliguen a los chicos a leer»: Nubia Macías
La falta de lectores tiene, entre otros, un origen endémico, afirma Nubia Macías: “Falta formación de lectores desde la primaria, tanto en las escuelas públicas como en las privadas. Y sobre todo: que no obliguen a los chicos a leer. Creo que aquí el problema es de obligatoriedad: tenemos que jalarlos más bien hacia la parte lúdica, de placer, de diversión, donde los chicos se encuentren cómodos participando de una fiesta de lectura y no de algo que deben hacer: eso en automático los aleja”. Y añade: “Imagina lo placentero que sería para un joven escuchar un bello poema al llegar por la mañana a la escuela a comenzar a jornada. Seguro que eso sería algo que le cambiaría toda la perspectiva. Este es un problema del sistema que no le corresponde solventar sólo a una institución”. Entre otros programas de promoción de la lectura, la FIL organiza en las preparatorias de Jalisco, a través del Sistema de Educación Media Superior de la Universidad de Guadalajara, Ecos de la FIL, para que los jóvenes conozcan a los autores que visitan la ciudad. El año pasado, 70 escritores acudieron a diferentes planteles de la UdeG. Y es algo que, dice la directora de la Feria, a los autores les encanta, porque los muchachos no se limitan a preguntarles sobre sus obras, sino también acerca de sus vidas.
Este domingo 17 de abril, en la Rambla Cataluña, (Escorza y Juárez, a un costado del Museo de las Artes de la UdeG) se repartirán galletitas de la suerte. De esas chinas que parecen un pellizco y saben a cono de nieve. Estas galletitas llevarán dentro frases de la obra del escritor que la gente eligió para ser homenajeado este año en el marco del Día Internacional del Libro: el guanajuatense Jorge Ibargüengoitia. Y las galletitas del domingo son apenas una parte de los preliminares de esta fiesta de los libros que alcanzará su punto culminante el viernes 23 de abril con una lectura al aire libre en el mismo punto. Esta es una fiesta que la gente ha hecho suya desde que comenzó a celebrarse en Guadalajara, ocho años atrás.
Empezó hace semanas. Las urnas transparentes estaban por toda la ciudad. Las encontrabas en cada librería. Había que elegir a un autor. Había que elegir a quien queríamos leer, y al contrario que nos pasa con los candidatos en la política, en la que escoger uno es tremendamente difícil por su mediocridad, en esta, la tortura de la indecisión radicaba en los meros nombres de los tres candidatos y sus obras, eran nada menos que Oscar Wilde con El Retrato de Dorian Grey, J.D. Sallinger con El Guardían entre el Centeno, y Jorge Ibargüengoitia con Los Relámpagos de Agosto. También se podía votar por medio de internet. Se convocó a la gente para que se registrara para la lectura pública de la obra. La respuesta de la ciudadanía fue apasionada e inmediata. En un país en el que se supone que nadie lee los votos rebasaron los 28,000, los 350 lugares para el evento al aire libre se llenaron en tres horas. La gente reaccionó desbordando las urnas. Jorge Ibargüengoitia se erigió como ganador. Y al contrario de las elecciones políticas, en esta nadie impugnó el resultado.
La charla con la directora de la Feria Internacional del Libro, Nubia Macías, transcurre ágil. Sus ojos, igual que sus manos –y sus ideas- no se quedan quietas. Le pido que abra una galletita de la suerte de las que serán repartidas el domingo, y que haga una pregunta antes. “¿La gente se va a entusiasmar con la lectura?” –pregunta. Y la galleta responde, contundente, con una frase de Los Relámpagos…: “Sería un crimen que por no hacer un esfuerzo, vayamos después a tener dificultades”. Imposible contradecir a la galleta. Nos reímos sorprendidas. Nubia interpreta al oráculo: “Sería un crimen que no promocionáramos la lectura y no consiguiéramos que la gente no vaya a leer ese día, y el resto de los días”. No necesito abrir otra galleta para saber que eso es algo que no sucederá.
La FIL lleva a cabo programas de promoción de la lectura en las preparatorias a través del Sistema de Educación Media Superior de la UdeG para que los jóvenes lean, a lo largo del año, obras de los autores que vendrán a la Feria. Un ejemplo son los Ecos de la FIL, en los que en el año pasado acudieron 70 escritores a las diferentes preparatorias de la universidad. Y es algo que a los autores les encanta, ya que los muchachos no se limitan a hacer preguntas acerca de sus obras, sino de sus vidas.
Macías cree firmemente que la falta de lectores tiene, entre otros, un origen endémico. “Falta formación de lectores desde la primaria, tanto en las escuelas públicas como en las privadas. Y sobre todo: que no obliguen a los chicos a leer. Creo que aquí el problema es de obligatoriedad, tenemos que jalarlos más bien hacia la parte lúdica, de placer, de diversión, donde los chicos se encuentren cómodos participando de una fiesta de lectura y no de algo que deben hacer, eso en automático los aleja” y añade, “imagina lo placentero que sería para un joven escuchar un bello poema al llegar por la mañana a la escuela a comenzar a jornada. Seguro que eso sería algo que le cambiaría toda la perspectiva. Este es un problema del sistema que no le corresponde solventar sólo a una institución”
Conquistar y seducir nuevos lectores es algo a lo que le apuesta el Día Internacional del Libro. “Fomentar el hábito de la lectura es un proyecto de estrategias, no de metas, los lectores están vivos, las generaciones se renuevan y siempre vienen nuevos potenciales lectores detrás”-comenta.
A propósito de la obra del escritor guanajuatense que se leerá a casi 100 años de la revolución mexicana, Nubia Macías enfatiza el carácter extraordinariamente actual de la novela. Los Relámpagos de Agosto, para quien no la ha leído, narra las desventuras del general José Guadalupe Arroyo en el México postrevolucionario. Es una obra ágil, ácida y cínica que además nos hace reírnos de algo que de entrada no debería ser gracioso: la tortuosidad del sistema político, la terrible corrupción, las alianzas en lo oscurito.
La cita es el 23 de abril desde las 10 am hasta las 9 pm en la Rambla Cataluña. La voz que hará el honor de abrir la lectura será la de Fernando del Paso, a él se unirán personalidades como Ofelia Medina, Víctor Ortiz, la cineasta Kenia Márquez, el escritor Antonio Ortuño y el actor Damián Alcázar, protagonista de varias películas inspiradas en guiones de Ibargüengoitia. Todos los lectores recibirán una rosa y un ejemplar de la obra. También habrá Feria de Libro, participarán alrededor de 23 stands de editoriales locales.
Y así es como Los Relámpagos de Agosto alumbraron abril.
No falte, ni este domingo a consultar su oráculo en forma de galleta, ni al viernes festivo que le acabo de mencionar. Si usted quiere leer y ya no alcanzó lugar, no desespere, preséntese el mero día, siempre hay necesidad de más lectores. Y despreocúpese si suelta una carcajada. Esto es una fiesta.
Enseñanza de vida (Estados Unidos, 2009) es la elección perfecta si tu novia no para de reprocharte que siempre escojas películas violentas. No por nada estuvo nominada a tres premios Oscar, incluyendo al de Mejor Película. En resumen, es la misma gata pero revolcada: el príncipe gallardo que vence al dragón y rescata a la princesa de un oscuro y frío castillo. Sólo que en esta ocasión la princesa es una adolescente inglesa de los suburbios que sueña con ingresar a la prestigiosa Universidad de Oxford y el príncipe un judío treintón que se gana la vida robando piezas de arte y metiendo familias negras a barrios exclusivos para obligar a las viejitas racistas a vender su propiedades a precios risibles. Es Londres, en 1961, y todo puede pasar.
Así arranca al nueva película de la directora danesa Lone Scherfig (Italiano para principiantes, Wilbur wants to kill himslef), quien se dio conocer con el movimiento Dogma 95 y que ahora se aleja de sus raíces para traernos una historia de época muy bien lograda. La cinta está basada en un ensayo autobiográfico escrito por la reportera inglesa Lynn Barber. En ella se cuentan los vericuetos de su adolescencia ñoña y el rompimiento con esa vida de bibliotecaria que implicó su relación amorosa con Simon Green: un hombre de gran verbo que supo ganarse la confianza de sus padres sobreprotectores para llevarla de paseo a los mejores clubes de jazz, a conciertos y a cenas e incluso a París.
Pero más allá del morbo que puede causar la historia de amor entre un treintón y una chica de dieciséis años, el gran acierto de Enseñanza de vida es la forma en que captura la esencia de una época. Cualidad que Nick Hornby (About a boy, High fidelity) sabe rescatar con uno más de esos guiones donde la adolescencia tardía y la buena música se unen para llevarnos hacia épocas y lugares tan ajenos a nuestra realidad mexicana que nos cuesta trabajo asimilar la forma en que nos hemos reconocidos en sus personajes.
Enseñanza de vida es una historia de mujeres para mujeres que los hombres también pueden disfrutar, gracias a la soltura de su guión y a la belleza indiscutible de su protagonista. Carey Mulligan salta a la fama con esta película como una lolita cuyo porte resulta una extraña mezcla entre Natalie Portman y Scarlett Johansson. Y a los que vayan con sus chicas, recuerden cerrar la boca en las inexistentes escenas de desnudos.
Últimamente altero mis tradicionales viajes en camión para cruzar la ciudad. Revuelvo rutas para no aburrirme y aunque perderé mi bono de puntualidad, he conocido una Guadalajara diferente. Más allá de la Calzada resultan deliciosos los paseos. Al comienzo sólo eran casas y llevaba libros e Ipod para no perder dos horas de mi vida. Hoy es sólo la contemplación lo que me entretiene desde el asiento junto a la ventana. Cuando miro hacia afuera mis vecinos de camión buscan lo que tanto me asombra en Loma Dorada o Las Huertas.
En mis intentos por enlistar al mundo descubrí dos tipos de comunidades: primero encontré las colonias y barrios que comenzaron con terrenos que la gente compraba para hacerse su casa, esos donde todos los edificios responden al presupuesto y al ideal de belleza de sus dueños, donde todas las casitas son gozosamente diferentes: unas con ventanas pequeñas, cuatro pisos, cúpulas en cada cuarto, macetas pegadas en las azotea, adornos de cementos sobre los muros exteriores, puertas donde habría que agacharse para entrar, mezclas extrañas de azulejo en las banquetas, tiendas de abarrotes, tlapalerías, cybercafés y cocinas económicas en cuartos-pegostes donde era la cochera. Una familia construyó una fuente de cantera que abarca su fachada de dos plantas, agregó cisnes y garzas de cantera rosa y días después un agujero a su cochera para que cupiera la camioneta. Ganó la belleza.
Después descubrí las colonias prefabricadas que antes consideraba el ejemplo clásico de los “no lugares” de Marc Augé, esos sitos carentes de antropología donde pareciera imposible encontrar identidad e historia. Eso parecen los cientos de edificios de departamentos pintados del mismo color, pero cuando la vista se agudiza y se relaja un poco, se van descubriendo algunos fascinadores rastros de bellezas para singularizar los espacios: el cactus sobre el balcón del último edificio en maceta de talavera amarilla, la puerta anaranjada del departamento de abajo, “se arregla ropa” en cartulina blanca y plumón negro, el sol y la luna de barro en la mínima fachada y las cortinas bordadas con girasoles. Hay que dejar de ver y comenzar a contemplar.
Este post, como su nombre lo indica, va de teatreros. Y es que la gente de Luna Morena, que desde el año pasado regentea el Teatro Guadalajara del IMSS, dio a conocer la cartelera que llenará sus días durante abril y mayo y hasta junio. Y como las actividades comienzan ya este fin de semana, aquí les traemos este post. Sirva, si se quiere, como una cartelera. Y que les aproveche.
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El círculo que gira
Ana Elisa Fernández montó esta obra hace dos años, gracias a una beca. Es, explica, una adaptación de Casa de Muñecas, de Henrik Ibsen. Se trata de un monólogo en el que la protagonista se enfrenta a sí misma, para liberarse de las ataduras impuestas por la sociedad de su época. Ataduras que, detalla Ana Elisa, siguen más que vigentes. Ella lo explica así:
«El círculo que gira es un trabajo entrañable. Nora es un personaje con mucha vigencia. El montaje hace reflexionar a partir de un personaje universal que recorre la ruta del héroe, buscando una liberación de sí misma»
En sus primeras temporadas, la obra se desarrollaba sobre un escenario portátil diseñado ex profeso para el montaje. Ahora, Ana Elisa Fernández se adaptará a las características de la tarima del Teatro del IMSS. «Pero no afecta el trabajo, porque todo está apoyado en el trabajo actoral y en los objetos», dice.
El círulo que gira
16, 17, 23 y 24 de abril
80 pesos, 60 para estudiantes, maestros y adultos mayores
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Serengueti
Aquí tenemos a una mujer que es bailarina y es madura. Acá tenemos a un joven que, con tal de cumplir su sueño, es capaz de cumplirle sus más lascivos deseos a la bailarina que, con tal de verlos satisfechos, es capaz de cumplirle sus sueños al joven. ¿Y cual es el mentado sueño? Visitar el Parque Nacional de Serengeti en África.
Estamos hablando de Serengueti, montaje que ha dado de qué hablar en cuanto a lo que teatro local se refiere. Fue ganadora del premio a Mejor Obra en 2009, además de que se llevó premios por su música. También le valió el premio a Mejor Actriz a Sara Isabel Quintero, su protagonista.
Esta obra llegará al Teatro del IMSS cortesía de la gente de Al Teatro en Bici, que tiene como hábito organizar paseos ciclistas que terminan, siempre, en algún espectáculo de artes escénicas. Así que si alguno de ustedes quiere ir, saque su bicicleta, échele aceite a sus cadenas —de las bicis— y prepare su condición física. Para que le pedaleye a la bicicleta.
Serengueti
30 de abril
Entrada libre
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Tarot patánico o lotería de patanes
Se trata de una de las primeras obras de la compañía Luna Morena. De hecho, hace como diez años que la estrenaron, aniversario que sirvió para que se animaran a sacarla del cajón. Es la primera que desempolvan, dice Miguel Ángel Gutiérrez, pero vendrán más.
Tarot patánico es una obra dirigida, sobre todo, a un público adolescente. Y adulto. Decidieron crearla porque todo mundo se afana en hacer montajes para niños o para adultos, pero entre unos y otros hay un público desatendido. Miguel Ángel Gutiérrez lo explica así:
«Encontramos pocas ofertas en artes escénicas para jóvenes. Tienen la música, pero están un poco olvidados por la danza y el teatro. Partimos de eso: de atender la necesidad de llegar a ese sector»
Ya veremos qué más se van a sacar del baúl estos muchachos de Luna Morena.
Tarot patánico o lotería de patanes
Jueves de mayo y junio, 20:00 horas
80 y 50 pesos
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Opa!
De nueva cuenta, Luna Morena y Les Cabaret Capricho unen sus talentos para ofrecer otra temporada de uno de los espectáculos más espectaculares que nos ha tocado ver: Opa! No vamos a escribir mucho porque este post ya se alargó demasiado y porque sería redundar. Den clic AQUÍ y podrán leer la crónica que hicimos hace unos meses sobre este espectáculo.
Si ya vieron el espectáculo, no le hagan confianza. Porque César Barrios, integrante de Les Cabaret Capricho, advierte:
«Es otro espectáculo, aunque es la tercera temporada. Hay cambios en la música, hay números musicales nuevos, tenemos nuevas rutinas de acrobacias. Aunque ya hemos tenido otras presentaciones, es algo diferente. Es como un espectáculo medio nuevo»
Habiendo visto lo anterior de esta mancuerna, podemos anticipar que va a estar chido.
Opa!
Sábados y domingos de mayo. 18:00 y 13:00 horas, respectivamente
90 y 70 pesos
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Y con eso ya acabamos. Ahí escojan lo que ustedes quieran.
Compartimos una fotogalería del concierto que, el pasado 9 de abril en el Foro Alterno de Guadalajara, ofreció la banda escocesa Franz Ferdinand. Las imágenes, por supuesto, fueron capturadas por nuestro roquerísimo colaborador Luis Ponciano y también se pueden encontrar en el canal de Composta.net en Flickr (o sea, en el bonito enlace).