En la semana escuché el lamento de que “nadie está ganando dinero en internet”. La expresión se refería al mundo de los periódicos, pero la exclusividad no le dotó ni la mitad de certeza: hay millones de personas que sí están ganando billetes con la red.
Internet exige ciertos condicionantes para encumbrar productos y servicios, pero si lo único que se busca es treparse a una tendencia y no dotarla de innovación, entonces sí estamos en el hoyo.
Google es un caso ejemplar: se montó a una tendencia, la de los buscadores en línea, e innovó el proceso de búsqueda. Ahora incursiona en todas las áreas de internet y se inventa muchas otras (Google Earth, Gmail Offline, Desktop). Google revoluciona casi todo lo que toca, y si no puede, compra al mejor…
…como YouTube, la meca de los sitios para ver y compartir videos en línea. Una plataforma que entendió la tendencia y la profundizó: la gente como generadora de contenidos. Ahora hasta las grandes cadenas la usan para compartir y promocionar sus productos y en muchos casos han aumentado sus ventas en los sitios especializados…
…como Amazon, que resistió la crisis de las punto com y se constituyó la mejor plataforma para la compra en línea, con cientos de categorías y millones de productos. Amazon permite al usuario opinar, discutir, relacionar sus gustos, ver lo que otros compran y compartir experiencias de consumo. Una red social basada en el comercio…
…como eBay y otros sitios de subastas, donde los usuarios pujan directamente por artículos que van de las rarezas y los artículos de colección al exotismo tipo mi virginidad en venta. Estos sitios generan una comunidad de confianza donde los usuarios se califican a sí mismos según sus relaciones de compraventa.
En cada uno de estos casos —paradigmáticos, claro— hay personas que comprendieron el potencial para realizar acciones lucrativas. En 2007, por ejemplo, MercadoLibre había identificado a 25 mil usuarios cuyo principal ingreso económico provenía de sus ventas a través de ese sitio.
Convendría a los periódicos imaginarse algo innovador, algo más que volverse “multimedia” y abrir migajas de su espacio a los lectores. Podrían comenzar por eliminar su concepción de únicos generadores de información. Sería un buen paso.