Hay noticias que simple y sencillamente rebasan los límites de lo creíble y que, suponemos, ni el más aguzado de los narradores podría haberlas perpetrado en su cabeza. Como lo que sucedió la madrugada de hoy en la carretera México-Tulancingo, cuando una elefanta de cinco toneladas escapó de un circo cercano, cruzó la carretera y fue embestida por un camión de pasajeros.
El chofer murió, pero antes de hacerlo logró evitar que el vehículo volcara y salvó a su tripulación, como deben hacer todos los capitanes de sus naves. Tomás López Durán nunca sospechó que un día atropellaría a un elefante. Desgraciadamente, fue lo último que hizo en vida.
Cuando vi la noticia, inmediatamente pensè para mis adentros:
Los de SensacionalD postearàn respecto a la elefanta arrollada…
Que surrealista se torna el paìs.
Me late cacahuate su blog. Por aqui estaré pasando.
Saludos
Hay que morir con estilo, siempre lo digo.
Y si vas a palmar en un accidente de tránsito, que sea atropellando a un paquidermo
Insisto y vuelvo a insistir que México es Ciudad Gótica.
Saltamos de crimen y corrupción casi absoluta a la locura en cuestión de meses y nisiquiera necesitamos a un tipo con disfraz de murciélago. En serio ¿que ya nada normal puede pasar en esta ciudad?
A este paso, el día de mañana algún investigador rencoroso de la UNAM se vengará de sus antiguos compañeros utilizando un arma congeladora de su propia invención, o un maníatico esconderá bombas en toda la ciudad y nos obligará a resolver acertijos.
Posiblemente era la mamá de Dumbo escapando del encierro que la separaba de su hijo.
Sra. Dumbo que descanse en paz.
¿Qué Pachuca por Toluca? Pos visíteme más seguido, pues. Saludos.
Camino a su libertad encontro la libertad mas temida por el hombre…tal vez se suicido…