Imposible perderse la excelente galería que treparon en Wired con fotografías de aeromozas de los cincuenta y sesenta: tiernas, aventureras y delicadas, justo como en las mejores fantasías.
Hay que decir que en Aeroméxico y en Alma de México llevan algunas chicas a bordo que no desmerecen ningún benévolo calificativo, por su calidad de servicio y sus excelentes tratos con el viajero (si alguien tiene una opinión distinta, le rogamos que la comparta), aunque les pediríamos que aceptaran algunos consejos del pasado, como los que aquí presentamos.
Los Wired trataron de realizar una historia de la evolución de la indumentaria: desde los trajes de cuello cerrado, tipo mao, hasta las minifaldas, los vestidos de una pieza y las botas casi a la rodilla. Una cronología fotográfica para identificar el momento exacto en que las aeromozas se volvieron símbolos sexuales, fetiches de viajeros lúbricos.
Lo mejor es la última pieza, donde una sexy sobrecargo con minifalda parece forjar un cigarrillo de algo, vaya usted a saber qué. En Boing Boing se preguntaban si realmente volaban con ese vestuario. Aquí rogamos por que lo vuelvan a hacer.
Vía: Boing Boing