En esta vida hemos tenido oportunidad de ver muchos goles. Goles buenos, espectaculares, elaborados, productos de grandes jugadas y, también, de célebres errores. Pero por más que buscamos y buscamos en nuestros recuerdos, no encontramos ninguno así de pendejo.
El portero a cuadro se llama Jurgen Sierens. Juega en el KSV Roeselare de Bélgica —o sea, juega de la belga— y se anotó, él solito, el gol más idiota que hemos visto en mucho, mucho, tiempo. Y como es lunes, pues aquí se los dejamos. A ver si les causa tanta gracia como nos causó a nosotros.