Pollos impostores

Los comerciales de la “belleza natural” de Dove se hicieron famosos por su excelente producción y contenido: un photoshopazo para asustar al más acérrimo defensor de la virtualidad. “No sorprende que nuestra percepción de la belleza esté distorsionada”, era más o menos el mensaje de la firma de jabones.

Eso de la “belleza natural” es un concepto new age bastante recurrido por las agencias de publicidad recientemente (basta ver los pabellones de Nivea en Insurgentes, cerca del World Trade Center). El comercial de Dove tiene más de seis millones de vistas en YouTube y ha motivado, como todo lo bueno en YouTube, un montón de parodias y chistes.

Lo más novedoso es la campaña de Foster Farms, una compañía estadounidense que promueve el consumo de “pollo verdadero”, como el suyo, y no imitaciones, como el de los otros. En la campaña, un pollo se enfrenta al maquillaje y al photoshop, para terminar convertido en un pollo exquisito y deleitoso, como nos gustan.

Vale la pena echarse un vistazo, sobre todo porque los “Pollos Impostores” de Foster Farms se están convirtiendo en un clásico de la comunidad latina de Estados Unidos. Acá, uno de los tres spots para televisión.

Vía: The Orange Market