Casi parafraseando la Biblia —cuando dicen que el tal Cristo dijo que todo estaba consumado—, Mourinho (no vamos a poner el nombre completo porque nos da hueva, si quieren denle clic sobre el apellido) terminó el partido de hoy con un categórico: «El trabajo aquí está hecho». ¿Cual partido? La final de la Champions, el torneo de clubes más importante del mundo. ¿Cuál trabajo? El de ganarse la copa, también conocida como la orejona. Y con el triunfo de hoy, el director técnico del Inter de Milán se va como todo un ganador, luego de haber obtenido un triplete: ganó la liga italiana, la Copa Italia y la Champions.
Y con eso como escenario, Madrid sueña…
Sueña con que se acaben los rumores y se haga oficial el fichaje de Mourinho como técnico del Real Madrid, en sustitución de Pellegrini; sueña con que la llegada del técnico portugués acabe con temporadas de ir a la saga del Barça; sueña con que el estratega, uno de los más polémicos tanto por su estilo de juego como por su personalidad, le dé sabor al banquillo; sueña con que éste llegue acompañado por Diego Milito, el encargado de marcar dos veces hoy en la final —y lo hizo con precisión cronométrica: al minuto 35 y al 70. Madrid sueña, en fin, con la llegada de este hombre, que no tiene empacho en decir que odia —deportivamente, obvia decirlo— al Barcelona.
Como si estuvieran cantando la tristemente célebre canción de El Venado, todo mundo se hace el desentendido. Nadie hace oficial nada y se presume que todo son rumores, son rumores. Pero las frases de Mourinho parecen ser claras:
«Quiero ser el primer entrenador en ganar la Champions con tres clubes distintos. Y el Madrid es el único equipo que se ha interesado por mí, pero no he hablado con nadie ni he firmado nada»
«No quiero ir más allá, porque entonces lloro y no estoy lúcido. Le doy las gracias al fútbol italiano porque seguramente soy un entrenador mejor, pero hay muchas cosas que no me gustan de él. […] Lo bueno del club es que queda gente como Moratti. Él se arriesgó conmigo y yo también lo hice. He conquistado todo y es el momento de pensar en una nueva aventura»
«Este en principio sería mi último partido y confluyen nostalgia y tristeza con alguna lagrimita. Si empiezo una vida nueva será aquí (en Madrid). El Inter es una opción y el Real la otra»
Mourinho dice todo eso. Y Madrid, y el Madrid, sueñan…