Y bueno: hoy fue el sorteo para definir los grupos del Mundial de Sudáfrica 2010. México quedó en el grupo A y, desde ya, se antoja complicado. El Tricolor tendrá que jugar contra el anfitrión Sudáfrica —cosa que implica que la Selección Mexicana jugará el partido inaugural de la justa mundialista— y también se medirá sobre la cancha contra Uruguay y Francia. Nomás.
El grupo, por donde se le revise, está difícil: si bien Uruguay y Francia llegaron al Mundial vía repechaje —y todavía está muy fresca la mano de Henry en el partido contra Irlanda—, la tradición futbolística de ambos equipos está fuera de duda y el hecho de que hayan tenido una mala eliminatoria no quiere decir que en la Copa del Mundo las cosas vayan a ser igual. Y debutar en el Mundial en el partido inaugural tendrá su carga de nervios, cosa en la que Javier Aguirre deberá trabajar desde ahora si no quiere iniciar con el pie izquierdo su torneo.
Ya hay quien dice que el quinto partido, esa meta que se hacen todos los técnicos cuando toman la dirección del Tricolor, ahora se ve más lejos que nunca. A ver qué pasa.
(Éste post fue un breve paréntesis. No tiene links y no nos importa. Está escrito, literalmente, sobre las piernas. Recuerden que seguimos en la cobertura de la Feria Internacional del Libro y que pueden seguir los contenidos en la Cultura Pirata de esta H. Composta. Sea.)