La semana pasada retomé el tema de los podcasts, esos productos de audio que se distribuyen por internet y que ofrecen al usuario la posibilidad de escucharlos donde quiera y a la hora que sea. Podcasts en el mundo hay miles, basta darse una vuelta por el sitio de Podcast Alley para elegir por género: desde comida francesa, pasando por los vinos, la medicina, los viaje, la cultura pop y la música culta. Un mundo de información hablada disponible en la red.
Los podcasts son unidades de audio que parecen entre programa de radio y canción; pueden descargarse de la red y escucharse en un reproductor de música. Regularmente son gratuitos y están en MP3, el formato de audio digital más popular.
Otra opción para buscar podcasts es iTunes, el reproductor de Apple y quizá el software más práctico para localizar y suscribirse a estos productos, que en tres años se han vuelto referencia informativa. En Estados Unidos, muchos podcasts son fuentes tan socorridas como los periódicos o las revistas especializadas.
En la ciudad de México existen cuatro empresas dedicadas a esto. Una es Frecuencia Cero, con programación diaria y contenidos bastante interesantes sobre política internacional, cine, periodismo, nota roja y misterio. Otra, mi favorita, es Dixo, patrocinada por los gigantes Prodigy y MSN (Microsoft), con 18 podcasts que van de los cómics al futbol.
Las que faltan son Jambitz, de Editorial Televisa, y la revista R&R, del productor radiofónico y cineasta Olallo Rubio. En R&R producen uno de mis podcasts de cabecera: Suena en el Estéreo, con puras novedades musicales.
En Guadalajara las opciones son mínimas. Apenas se cuenta con las producciones radiofónicas llevadas al formato podcast, que por una parte representan un buen servicio para los cautivos de la estación que los distribuye, pero no representan algo distinto a lo ya transmitido por la emisora. No es contenido exclusivo para internet.
Están los casos de Notisistema y Radio Universidad, con muchos de sus programas a disposición de los usuarios. Yo estoy suscrito a varios, porque no puedo sintonizar la emisora a la hora precisa, pero también me gusta viajar por la red y encontrarme cosas que no suenen en la radio.
feliz cumpleaños, José, de tu nina Vicky. Dice Victor que tienes razón a cerca de lo de la «concomic». Saludos.